Miedo, temor a lo que pasará en el parto, a no saber si soportarán el dolor, son los pensamientos contradictorios que revolotean en la mente de las futuras madres; enfatizados en las primerizas; y es normal que sientan estas angustias, ya que desconocen lo que vivirán en el momento del alumbramiento.

Sin embargo, existe la psicoprofilaxis obstétrica, que es un método de preparación física y psicológica en la pareja para vivir un parto natural feliz.

El doctor británico Grantly Dick- Read en los años 40 escribió el libro “Parto sin miedo”, mostrando métodos para evitar el temor y el dolor en el momento del parto. A él se han unido otros científicos como Fernand Lamaze y Anatolio P. Nikolaiev que han investigado diferentes formas de aminorar la tensión, ansiedad y dolor de las mujeres a la hora de dar a luz. Ellos aseguraron que cada mujer vive el parto de forma particular, dependiendo de las condiciones de vida de cada una. Acá se encuentran influencias fisiológicas, psicológicas, culturales, religiosas y mitos. Para mitigar estos condicionamientos los expertos establecen que la educación, preparación física y preparación psicológica son la clave para sobrellevar felizmente el parto natural.

Dotar a las madres de todos los conocimientos sobre lo que ellas vivirán les ayudará a comprender mejor y a prepararse, para optimizar el proceso y evitar conductas y actos que pueden entorpecer el desarrollo del parto.

La preparación física consiste en realizar una serie de ejercicios, llamados gimnasia prenatal. El cuerpo de la futura mamá es adiestrado con el mínimo esfuerzo para fortalecer los músculos, practicar pociones y controlar la respiración. Se recomienda iniciar los ejercicios después del segundo trimestre de embarazo y siempre se debe consultar con el médico. 

El bienestar mental debe ir de la mano, por ello la preparación psicológica es el último pilar del parto psicoprofiláctico. Este consiste en ejercicios de meditación y relajación acompañados por música suave, y realizados en un ambiente de paz. La participación del padre desarrolla un vínculo más fraterno entre la pareja y el futuro bebé. En esta preparación se incluyen masajes suaves en el abdomen y terapias de sonido y visuales para estimular al bebé.

Estos tres puntos no solo ayudan a controlar la ansiedad, miedo y estrés del parto, sino que se ve fortalecida la conexión entre madre- padre - bebé.

Ventajas de la psicoprofilaxis

Varias investigaciones concluyen que el parto psicoprofiláctico posee meritorias ventajas entre ellas se destacan:

• Enfrentar con  habilidad las contracciones y el dolor.
• Mínimo uso de medicamentos.
• Mínima duración del trabajo de parto.
• Recuperación más rápida.
• Menor tiempo de estadía hospitalaria.
• Bebés con mejor peso al nacer.
• Disminución del sufrimiento fetal.
• Mínimo uso de incubadora.
• Menores cólicos en recién nacidos.
• Disposición positiva hacia la lactancia.

El parto psicoprofiláctico es aplicable para el parto vaginal, claro toda la preparación siempre traerá ventajas si se llegará a presentar alguna complicación, como un cambio de posición en el bebé o el tamaño de la cabeza es muy grande y se debe recurrir a un parto por cesárea. 

Vivir un parto natural disfrutando cada una de las etapas es posible. La clave radica en la preparación.