Cartago, noviembre 2018.- El tres y cuatro de Noviembre se llevó a cabo una doble exposición, tecnológica y artesanal  en la obra salesiana de Cartago.

La Academia Salesiana, frecuentada por unas 300 alumnas de toda la región, expusieron los trabajos artesanales que las alumnas han realizado durante todo el año en las quince especialidades que se imparten: corte y confección, cocina, repostería, quilting, dibujo en 3D, bordado, etc, etc. Verdaderas obras de arte que se vendieron como pan caliente. Numeroso público de Cartago y alrededores llegaron para comprar o admirar tan elegante artesanía. Muchas de las aprendices, que en general son amas de casa, después abren su empresa para vivir de lo aprendido en la casa de Don Bosco.

Todo ello es posible, gracias a la generosidad de unas treinta instructoras que los miércoles y jueves dedican su tiempo y trabajo ad honorem como obra social para ayudar a la gente pobre, que también abunda en Cartago.

Pero no es solamente una obra social la que hace la Academia, sino también religiosa, pues todas las participantes reciben educación en la fe. De esto se encarga ahora el P. Director Luis Ricardo Chinchilla que todas las semanas les da una plática espiritual y también les celebra la Eucaristía. A ello colabora también la Directora Lourdes que puntualmente participa en el Consejo de la CEP. 

La exposición tecnológica la hizo el Clubhouse, frecuentado por niños y jóvenes de 10 a 18 años de edad, de martes a sábados de 9 am a 5 pm. Funciona en colaboración con el mismo Clubhousse de Cedes Don Bosco que son parte del Clubhouse mundial con sede central en Boston, Estados Unidos. Está dando un gran servicio a numerosas escuelas del gobierno. En este caso, la condición es que juntamente con los niños de la escuela lleguen la maestra de grado y algunos padres de familia responsables de los niños. Pero muchos otros jóvenes llegan por su cuenta, especialmente de las zonas más pobres, como la de “Los Diques” de Cartago.

El Clubhouse es un espacio gratuito de aprendizaje que pretende que los niños y jóvenes que asisten aprovechen su tiempo libre de forma productiva al aprender sobre temáticas tales como robótica, 3D, animación digital, edición de audio y vídeo, dibujo, entre muchas otras cosas.

El Clubhouse fomenta la creatividad e inspira a los jóvenes a aprender en un ambiente ameno de familia donde no sólo se instruyen en el uso de las herramientas tecnológicas sino que también se divierten y hacen amigos en el proceso.

Los chicos y chicas que asisten al Cluhouse aumentan la confianza en sí mismos al verse capaces de crear infinidad de proyectos creativos en muchas áreas y con herramientas profesionales que generalmente no ven en los centros de educación formal. En el Clubhouse se insta al aprendizaje de valores ya que los proyectos que aquí se realizan deben llevar un mensaje positivo que de ser posible sirva como inspiración para la comunidad que asiste y que desea asistir.

El único requisito para formar parte del Clubhouse es tener entre 10 y 18 años de edad, tener deseos de aprender, explotar la creatividad y tener constancia . Una vez como integrantes del Clubhouse, los jóvenes tienen la posibilidad de participar de diversos programas internacionales que premian su creatividad y constancia.

Las adjuntas fotografías muestran algunos de los trabajos realizados, tanto en el Clubhouse como en la Academia.

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