Granada, junio 2018.- La noche del cinco de junio la ciudad de Granada fue un caos. El comercio fue víctima del saqueo y la quema de negocios.
En la mañana del día seis Granada amaneció en desgracia. La comida y productos de primera necesidad comienzan a escasear. Los comerciantes, para evitar el saqueo, se llevan sus mercaderías. La gente manifiesta ansiedad por abastecerse de comida, los supermercados están quedando vacíos.
Por el sector del Colegio Don Bosco, la situación está controlada. La calles siguen cerradas con barricadas. Están suspendidas las actividades escolares. La capilla se abre sólo para la misa y luego se cierra.
En Masaya la población continúa en la lucha. Los Salesianos siempre cercanos. Esto es igual en Managua donde se encuentra el Centro Juvenil Don Bosco.
¿Quienes atacan?
A la policía se unen los grupos paramilitares y la Juventud Sandinista que luchan contra el pueblo que protesta. La petició del pueblo de Nicaragua es clara: la renuncia de Daniel Ortega al poder.
"Acá en Nicaragua y especialmente en Granada todos nos conocemos. En los ataques nadie va indentificado pero claramente sabemos quienes son. Hay mucho cuidado en las protestas porque el bando contrario se están infiltrando en los grupos del pueblo. Todos estamos atentos" dice un ciudadano de manera anónima.
La noche del seis intentaron saquear un supermercado. El pueblo se unió para defender el lugar, resultaron heridas dos personas. Cómo medida de seguridad se levantaron tres barricadas cerca del lugar del incidente.
Hubo intentos de quemar el mercado municipal. Pero los pobladores lo evitaron. Las calles de Granada permanecen cerradas. La movilidad de las personas es a pie.
La mañana del día siete de junio amaneció con relativa calma. La conferencia episcopal se reunirá con el presidente. Ellos han invitado a unirse en oración frente a Jesús Sacramentado.
El encuentro se producirá a las 3:00pm en la "Casa de los pueblos", luego a las 7:00pm estarán brindando conferencia de prensa para contar los resultados del encuentro.
