San Salvador, agosto 2025.- En un ambiente de fe y alegría, la Congregación de Monaguillos del Instituto Técnico Ricaldone vivió un momento especial al recibir la bendición de sus ornamentos.
Acompañados por sus padres, los jóvenes fueron presentados a la comunidad estudiantil como signo de una vocación de servicio que florece en la espiritualidad salesiana. Tras la bendición, fueron sus propios padres quienes tuvieron el gesto de colocarles la sotana y el roquete, vestiduras que los identificarán en su misión de servir tanto en el Templo Santo Domingo Savio como en las celebraciones dentro del colegio.
La jornada concluyó con un convivio fraterno, en el que los monaguillos compartieron una merienda, fortaleciendo así los lazos de amistad y comunidad que caracterizan la vida salesiana.