San José, mayo 2014.-  Centenares de personas participaron en la misa solemne en honor a María Auxiliadora el sábado 24 de mayo en el Templo Don Bosco, ocasión en que se conmemoró los 200 años de la instauración de esta fiesta mariana.

También se contó con la participación del coro de la Universidad de Costa Rica, dirigido por el maestro Rafael Angel Saborío Bejarano que recibió los aplausos de todos los asistentes.

En su homilía el Padre Carlos Chiu Fuentes mencionó que el Papa Pío VII estuvo recluido en el castillo de Fontainebleau por órdenes del emperador francés Napoléon Bonaparte. Durante los cinco años de cautiverio dedicó tiempo de sus oraciones a María Santísima, Auxilio de los Cristianos para que protegiese a la Iglesia perseguida, desgobernada y desamparada. Los ruegos del Papa fueron escuchados y en 1814 Napoleón firmó su abdicación.

El Papa para manifestar el agradecimiento de todo el orbe católico a la Virgen María y como un expreso reconocimiento de la infalible protección de la Madre de Dios, instituyó la fiesta de María Auxiliadora en el día 24 de mayo para perpetuar el recuerdo de su entrada triunfal a Roma al volver de su cautiverio en Francia. Desde entonces se celebra en todos los países del mundo.

Hubo celebraciones en varias partes del país y las más populares son las organizadas por las Hijas de María Auxiliadora en la Casa de Sor María Romero, donde miles participaron en las mañanitas, misas, adoración del Santísimo, reuniones de exalumnas y venta de comidas.

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