Ciudad de Panamá, noviembre 2025. – Con un ambiente de fe, alegría y preparación espiritual, la Basílica Don Bosco inició solemnemente el Tiempo de Adviento, marcando el comienzo de un nuevo año litúrgico. Desde tempranas horas, numerosos feligreses acudieron al templo llevando consigo sus coronas de adviento, las cuales fueron bendecidas durante las celebraciones eucarísticas, como signo de espera gozosa y vigilante ante la venida del Salvador. Este gesto sencillo, pero profundamente simbólico, llenó de esperanza a las familias, que ahora esperan la Navidad con un corazón dispuesto y encendido en la fe.
En este mismo contexto, la Pastoral de Catequesis vivió de manera especial el inicio del Adviento mediante un espacio de meditación y reflexión sobre este tiempo de preparación. Niños, jóvenes y adultos elaboraron sus propias coronas de adviento como signo visible del compromiso de preparar el corazón para recibir a Jesús. A través de cantos, momentos de oración y trabajos personales, los catequistas y catequizandos profundizaron en el significado de este tiempo fuerte de la Iglesia, renovando su deseo de vivir con esperanza, conversión y amor.
Este inicio del Adviento reviste una gran importancia para la vida cristiana, ya que invita a los fieles a detenerse, reflexionar y prepararse espiritualmente para el nacimiento de Cristo. La vivencia comunitaria en la Basílica Don Bosco fortalece la unidad, la oración y la esperanza de todo el pueblo de Dios, que aguarda con alegría la llegada del Emmanuel, Dios con nosotros.
