Foto por: Conejo SanzHabía una vez una casita. En ella vivían papá, mamá y dos niños. El mayorcito era más juicioso, dedicado a sus tareas; el pequeño era un tanto envidioso y molestón; a menudo se peleaban. Una tarde la mamá les dijo: “Niños, dejen de pelear; ayúdenme; vamos a llevar alguna ropita y unos juguetes a la familia de Pedrito, que son muy pobres”. Los niños dejaron de pelear, ayudaron a mamá a recoger juguetes, ropa y galletas, y felices se fueron con ella.

samWorkdleyEn estos días en que nos vemos azotados por la tremenda calamidad del COVID-19, se oye muchas veces la palabra “agonizantes” e incluso se elevan oraciones por los que están “en agonía”.

Foto por: londondepositEn el año 2018 la Corte Suprema de los Estados Unidos falló en favor de un repostero que había rehusado hacer un pastel de bodas para una pareja gay. El repostero, que reside en Colorado, apeló a sus creencias religiosas para negarse, ya que es un convencido cristiano evangélico: “Lo siento, muchachos, no hago pasteles para bodas entre personas del mismo sexo”, fue su tajante respuesta.

Ilustración por Alexandra HaynakDebo confesar que el problema de “sexo y género” nunca me ha gustado. Lo considero, en buena parte, un pseudo-problema; un problema artificial de personas y grupos muy particulares; problema de una sociedad desquiciada. Me parece más “ideología” que ciencia.

CIencia DiosMuchos piensan que hay una tensión irreconciliable entre Dios y las Ciencias Naturales. Lo cual es completamente falso.

Foto por: Satya TiwariEn América Latina la mayoría de las jóvenes todavía miran hacia su futuro matrimonio y hacia la maternidad con ilusión. Pero, en otros países occidentales, alguien ha calculado que las jóvenes sienten que pierden un 30% de independencia si se comprometen con una pareja; y si tienen hijos pierden el otro 70% de independencia. Por eso muchas jóvenes ya no se casan ni quieren tener hijos.

Foto de: Alexandr Ivanov

El cuerpo humano no puede ser despreciado, como si fuera pecaminoso. Tampoco puede ser idolatrado como si fuera sagrado en sí mismo.