DARIO Tengo 26 años de edad, soy el mayor de seis hijos, provengo de una familia de escasos recursos económicos, fui criado solo por mi madre en Santiago de María,
El Salvador. 

A los 17 años emigré a San Salvador para estudiar ciencias jurídicas en la Universidad Nacional. Entonces conocí a Don Bosco, cuando participé en un retiro juvenil ESCOGE en la Ciudadela Don Bosco. El contacto con Cristo joven me ayudó a adentrarme en la pastoral juvenil salesiana.

 

Me involucré en el Oratorio, animado por el lema salesiano: Honrados ciudadanos y buenos cristianos. 

Como abogado, trato de poner mis conocimientos al servicio de los demás, inspirado en la búsqueda de la santidad en el trabajo diario.

 

En el movimiento juvenil EJE presté mi servició como coordinador a nivel local y nacional. Actualmente soy coordinador del Movimiento Juvenil Salesiano de Ciudadela Don Bosco. 

He sido invitado a servir como ministro extraordinadio de la eucaristía en la Parroquia San Juan Bosco, lo que me permite dar un testimonio de la misericordia de Dios a los jóvenes. El hecho de que Jesús se deje entregar a mis hermanos por mi medio me llena de paz.

 

Dios no elige a los capacitados, sino que capacita a los elegidos. Los ocho años que llevo entregado a la pastoral salesiana han sido una experiencia de Dios que moldea mi vida. He aprendido a vivir en clave de esperanza las cruces de cada día. Me esfuerzo por vivir a la altura de mi condición de hijo de Dios.

 

Hay mucho trabajo por delante que me espera. Campos nuevos de acción que se van abriendo. Con la guía de Don Bosco e inspirado por el Espíritu Santo busco ser fiel a mi vocación salesiana misionera.

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